Cuando se me ocurrió la idea de hacer un blog, alguien me aconsejó que incluyese cuanta más
pornografía mejor, pues sin algo de sexo no me iba a visitar ni mi vecino del sexto.
Aunque soy mujer clásica, también soy una mujer de mi tiempo y he decidido incluir en este
blog una galería de fotos de aquellas personas que han permitido que las fotografise desnudas.
Me comprometo a no sacar a nadie desfavorecido. Aquí os muestro a los dos primeros.
Caminaba por las preciosas calles florentinas cuando me topé de narices con unas musculosas
piernas, levanté la vista y todo lo que observé no desmerecía esa primera visión. Un mozo, un
poco seriote, posaba desnudo para los viandantes y alumnos de una escula de arte, imagino.
Unas preciosas manos y un trasero de película, a lo demás no le presté especial atención. Con
cierto disimulo he hice unas cuantas fotos, no más de cuarenta y continué mi camino. Me
dirigí a un famoso museo, La Galería de la Academia, y seguro que me tomáis por mentirosa,
pero os juro por el ángel caído ( es que soy medio atea y no me gusta jurar por Dios) que
allí ante mis ojos se hallaba un hermano, yo diría que gemelo, del mozo que posaba desnudo
en la calle. Pero este estaba mucho más bueno, ejem, disculpen, he querido decir que este
chico seguro que frecuentaba mucho más el gimnasio. ¡Qué abdominales! Era un chico
también de manos grandes, no recuerdo un dicho que relaciona la proporción de las manos
con otras partes del cuerpo. Tal vez fuere con la cabeza, que también se dejaba ver. A este
no le hice ninguna foto, pues era algo más altivo que el primero, y tenía un pequeño
cartelito a sus pies ¡qué bonitos pies ! solicitando amablemente que no se he hiciesen fotos
(Os paso una de extranjis). Después de tanto sobresalto me fui a tomar un rico helado,
que además del alma, hay que alimentar el cuerpo.
http://www.firenzemusei.it/00_english/accademia/index.html