domingo, 20 de marzo de 2011

Vacas


Imaginemos un hipotético caso en que se me permitiese escoger un único animal de todos los que hay en este mundo para poder observarlo el resto de mis días. En un momento inicial e impulsivo, tal vez,  me dejase llevar por el físico y escogiese el tigre de Bengala, el Tigre de Malasia en sus años mozos tampoco desmerecia, pero no me voy a desviar del asunto, después de esos instantes iniciales de ofuscación seguro que elegía un animal que siempre he venerado: la vaca.  Nunca  he podido  resistirme a la tierna mirada de una vaca.
De pequeña pasaba los veranos es casa de mis abuelos, entre puchas,  amarelas, vermellas y rubias. Qué nombres más curiosos les ponen a las vacas. Cada mañana salían a pacer  en doble  fila india y  cada tarde regresaban mereando sus colas en un afán de espantar las molestas moscas,  igual de ordenadas. Sólo alguna jovenzuela díscola, de vez en cuando,  se exhibía,  rompiendo la monotonía y lanzando algún amago de coz que solía quedarse en nada.
Por mi  carácter diría que soy un poco vaca. No es la primera vez que me dicen "vaca, mueve el culo".  No me malinterpreten. No soy la persona  más vaga del mundo,  ni creo que las vacas lo sean. Pienso que las vacas son seres meditabundos que no han nacido para la acción.  Habrá quien crea que son un poco lelas pero yo más bien creo que son como el dios del que me hablaban las mojas en mis años infantiles. Ese ser que nos contempla a todo rato, pero no inteviene ni para bien ni para mal porque ha hecho de nosotros seres libres y  con su intervención violaría esa libertad. Las vacas igualito. Te observan y ni se inmutan, no mueven apenas ningún músculo que no sea para rumiar  y rara vez cambian su posición excepto que no respetes su espacio vital. No es vagueza, no señor,  es vivir y dejar vivir.

Les sorprendería a donde han llegado algunas vacas, desde posar como la mejor top model  a cantar , actuar  o  escribir un libro de memorias.



                                               Memorias de una vaca- Bernardo Atxaga
Una vaca que quiera ser vaca de verdad, y no una vaca tonta, acabará por toparse con el desierto; no conseguirá cumplir con el deseo sin antes conocer el amargo reino que, lejos de este mundo, sólo puede ofrecerle arena. Y entre la arena, sin una brizna de hierba, sin una gota de agua, la vaca que quiera ser vaca de verdad creerá enloquecer, y a veces, los días en que el sol castigue con más fuerza, se arrepentirá de haber comenzado el viaje y soñará con las dulzuras del establo que dejó. Pero ella, que recuerda bien lo tontas que suelen ser las vacas tontas, no cederá al desaliento; seguirá adelante hasta atravesar el desierto y tener antes sus ojos los montes húmedos y los bosques sombreados. Entonces, recordando lo que dijo el poeta, declarará así: Cela s´est passé, ya todo ha pasado, he salido del infierno, veo el mundo con ojos y corazón nuevos. Antes me faltaba la balanza de medir el valor de las cosas; pero ahora en el desierto, la he encontrado.
Yo también quería ser una vaca de verdad, y apartarme de la tontería lo más posible, reunirme de nuevo con La Vache, mi primera y única amiga; pero el camino que llevaba del grupo de las tontas hasta ella era un camino que cruzaba el desierto.
Y el desierto, en mi caso, tenía un nombre: Soledad. No Pobreza, Enfermedad o Cárcel, como se llaman los desiertos de tanta y tanta gente, sino Soledad. Por decirlo de otra manera, era un desierto opuesto al de Pauline Bernardette, pues el de ella era el que habitualmente se conoce con el nombre de Matrimonio.
                                                                           

He fotografiado algunas vacas a lo largo de mi vida,  no voy a decir que ninguna haya dicho ni mu, pues algún mu ha habido, pero ninguna se ha negado a ser retratada y todas han posado con naturalidad vacuna.

Leme-Brasil


Galicia-España

                                                                                           
Viñales-Cuba

Isla de Taquile-Perú

 
Yangshou-China

 

Isla de Pascua- Chile


Tal vez no se crean lo de las  habilidades artísticas, vean, vean: 

 


http://www.youtube.com/watch?v=MZqMGWcEv2Y


Una muestra de que Las vacas están haciéndose un lugar en este mundo de hombres es que han logrado tener una exhibición vacuna de carácter mundial: la CowParade. Las vacas más osadas han colaborado con artistas de todo el mundo permitiendo que en cada lugar que han visitado  los artistas locales las hayan disfrazado de lo más variopinto.

http://www.alonsoformula.com/foto3d/cow_parade_vigo_1.htm
http://www.cowparade.com/WorldwideGallery.php




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